BUEN TRABAJO -Supongo que no te importará que me acomode- Dijo mientras se tumbada en un diván, algo destartalado, situado en un extremo de la habitación, iluminada tenuemente por una pequeña bombilla que colgaba desnuda del techo. -He de decir- continuó con su monólogo, desabrochándose con dificultad el primer botón de la camisa, el cuál oprimía visiblemente su cuello. -que no suelo hablar mucho de mi vida privada, quizá sea la primera vez que lo haga con un desconocido, pero a veces, sienta bien soltarlo, sabes?. Odio mi trabajo. Sí lo odio. Todos los putos días me levanto de la cama pensando, hoy va a ser el día, hoy lo voy a dejar. No se...- prosiguió incorporándose lentamente- quizá encuentre un curro tranquilo en el barrio, o quizá me pierda en una isla...no lo sé, lo que está claro es que mi vida se va a la mierda y tengo que hacer algo. En ese instante sacó su nueve milímetros, y clavando su mirada sobre un cuerpo maniatado y con fuertes signos de violenc