Yo sí los veo brillar, como pequeñas notas bailando ligeras, pululando a tu alrededor.
Nunca mis deseos alcanzaron tus pensamientos, tu mirada se confunde con carbón y herrumbre.
Quizá cuando ya no esté, quizá ese día tú también los veas brillar a tu alrededor, quizá ese día aprendas a mirar como yo siempre lo hice.

                                    Inés García Ècija

Comentarios

Entradas populares de este blog

Cuando seamos olvido

Y si...