Cuando seamos olvido

Y ahora que no corrijo
Puedo escribir
Ahora que dejo que lo increíble sea visible
Que mis errores sean luciérnagas que admiran lo bello que esconde el misterio de la oscuridad
Ahora que no solicito pleito ni cortesía
Que dejo que el rayo campe a sus anchas
Que la palabra trascienda y sobresalga ante la inmensidad
Ahora que nada importa
Ahora que lo impreciso es conciso
Que todo es voluble
Que todo es afable
Que nada me daña
Ahora es cuando lo increíble es visible
Ahora
Inés García Écija