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Mostrando entradas de 2020
 Soy un poco de ti, un poco de estrellas, un poco de miedo, y un poco de valor. Mis pies son tierra, un poco de lluvia, un poco de mar. Tengo en mi espalda guijarros pesados, pulidos por el viento que roza mi cuerpo al volar. Mis piernas, a veces son lastres que no quieren caminar, empujadas por el tiempo, buscando libertad.  Soy un poco de tu pensamiento, de su mirada, de mi pesar. Y con todo me construyo, me rompo y vuelvo a empezar. Inés García Écija
 Sólo en lo profundo, en su mar turquesa, esconde el reflejo de mi corazón. Florecen algas color niebla alrededor, y un llanto de sirena aleja la brisa que el mar acercó. Sólo en el borde del acantilado, si ves tu reflejo, me ves reflejado. Inés García Écija

Danza

Cómo danza sin melodía  el brillo cristalino de tus ojos, cómo danza en el silencio cómo brilla sin luna la noche. Inés García Écija
 Te vas, te alejas.   Y en cada suspiro perdido  sucumben mis besos prohibidos.   Inés García Écija

Niebla

 Amo la niebla azul celeste de tus pensamientos ,que emanan en cada mirada perdida, abandonada en cada latido, a su suerte.   Inés García Écija

Como yo

 Te dirán que te quieren más, pero tú querrás que te quieran como yo.   Inés García Écija

Olivo y tiempo

 A veces sólo quiero estar allí, sentada entre hojas verdes de olivo,  con camuflaje indefenso de niño,  Viendo el mundo de lejos,  a distancia del dolor, sin espejo A veces sólo quiero estar allí  Viendo el paso de personas,   Observando cómo se emocionan  Viéndolos de lejos Aislada de la duda y del momento  Entre las ramas de un viejo olivo Bañado de luz plata y lino Seda que abraza como sueño De un paseo silencioso por el tiempo. Inés García Écija

Mar de luna

 Mar de luna Siento la lluvia en mi cuerpo Como lágrimas de luna acariciarme Llora la noche tu silencio Llora la noche mar de hielo Inés García Écija

Brevedad

 Melancólico llanto de otoño tiñe las hojas de un breve suspiro de vida. El tiempo dibuja en sus pétalos, mirando a mis pupilas de rosa rota. Y un hilarante hilo ilumina con brevedad las pálidas sendas que se pierden en la lejanía.  Brevedad. Somos suspiros de brevedad, viajando a la velocidad del sonido, en el transcurso de un recuerdo de un tiempo que desafío, en cada latido de soledad. Inés García Écija
 Cuando mis manos sean humo Y dejen de leer Los surcos de mi pensamiento Que mueren al nacer Cuando mi nube sea lluvia Cuando en mi mente muera el sol Me perderé para siempre Me haré lluvia, nube y sol. Y en ese ahora, que es un quizás  En ese momento de cal y sal Mis manos se harán alas Min nubes me alzarán Veré el tiempo inmóvil  Abrazado a mi tempestad  Inés García Écija 
 Dibujo, pienso y escribo,  y luego todo lo dejo. Pienso escribo y beso Que un beso tuyo,  sujeta mi tiempo Que un beso tuyo,  me abraza por dentro. Inés García Écija

Azul melancolía

Azul melancolía  Y cada día   nace un sol  hirviente en poesía  Con letras mías  Escritas con agua de lluvia  Recolectadas en tardes  de azul melancolía.  Inés García Écija

Arroz con lágrimas de leche

Arroz con lágrimas de leche Vengo de donde la tierra roja  Teñía nuestro juego De dónde la habitación era un sueño compartido Dónde hacer los deberes se convertía en desafío  Y un pan con pipas  era un regalo bendecido Vengo de dónde el balcón era un edén  Dónde la vida cantaba Donde la música bailaba Y a pesar de las lágrimas  Se cocía arroz con leche en la cocina mamá siempre nos besaba  A pesar de la dificultad  Ella siempre bailaba Vengo de una torre De un cuento sin principe Pero con dragones Vengo de dónde se agudizaban los sentidos Y un trozo de arcilla unía nuestro nido Vendíamos sueños modelados  y mi hermano mayor nos cogía de las manos Vengo de un lugar Del que no olvido El que me ha construido Donde siempre, a pesar de las dificultades  Se cocinaba arroz con lágrimas de leche. Inés García Écija  Dedicado a mis hermanos y mi madre, gracias por guiarme y enseñarme

Aire

 a veces quisiera ser aire para volar junto a ti, para mecerme junto a las olas, para acariciarte el pelo sin que me veas........a veces quisiera ser aire para volar junto a ti.... Inés García Écija 

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Y una luna de escamas de hielo me visita cada noche por la ventana,  y besándome la frente me susurra  cuanto me piensas, cuánto me sientes. Y cubierta con su brillo de luciérnagas polares Vagan mis deseos entre la espuma de tus mares. Viajo a la deriva entre sueños pasajeros Revolotean tus besos entre mis deseos Lejos de la cordura Lejos de aquel desierto Miro hacia la luna Jurándole amor eterno.  Inés García Écija
No soy responsable de tus actos, no soy responsable de tu arrepentimiento, no depende de mi perdón tu redención, así que no lo busques. Cada uno es responsable de sus actos, de sus errores, no esperes el perdón de otros para sentirte bien contigo mismo, para creer que todo ha pasado.  Yo no soy tu dios como para poder perdonarte, no me reprocheis si no lo hago. Cada uno debe de cargar con sus demonios, no necesito perdonar para sentirme bien, yo no tengo tu carga, tampoco la voy ha hacer mía. Inés García Écija

Contigo

Y así comenzó mi día. Con la misma sensación de encontrar una moneda en el bolsillo justo cuando te apetece un pedazo de tarta. Como la sonrisa con la que tropiezas en un mal día y te devuelve a la vida.  Así empezó mi día; Contigo, después de dejar de buscarte.  Inés García Écija
La única llave que abre el latido de mi alma, que saca las letras  que están sujetas, encarceladas, es la banal esencia de lo profano,  es el licor de la vida, sin eso estoy perdida,  sin mis versos  ya no hay beso de huída. Inés García Écija

Pensamiento 148

¿Y después qué?...  Después, hablaré con la luna cada noche, preguntándole si te ha visto.  Inés García Écija

Pensamiento 147

Hay cosas que deben quedar entre tú y yo...como un regalo silencioso...como el tiempo cuando regala vida. Inés García Écija
Cuando ya no esté, la lluvia borrará de tu dolor ese pensamiento del ayer. Cuando ya no esté seré la brisa que roce tu piel. Inés García Écija
Estaré donde el destello de tus pensamientos alumbren el camino. Estaré donde la multitud sueñe, donde los sueños despierten.  Estaré donte tus pasos escuchen mi voz, y sean ligeros augurios de nuestro mañana juntos. Estaré donde me dirijan tus pensamientos . Pero no lo dudes nunca, Allí estaré. Inés García Écija